Administra tu crédito personal de la forma más
eficiente
Los créditos son una fuente de malas
experiencias y malos momentos para muchas personas. Lo curioso es que muchas
veces esas mismas personas acceden a solicitar un crédito en busca de una mejor
vida, de pasar un buen momento, o creyendo que va a mejorar su situación
financiera.
Lo cierto es que la deuda debería tomarse como
un gasto al que se accede únicamente en una situación de emergencia, como ante
gastos por una enfermedad o un accidente, o cuando se tiene una certeza
suficiente de que se va a recuperar lo solicitado, mediante un negocio o
proyecto que rentabilice el dinero a una tasa mayor que aquella que se paga al
banco o a quien preste el dinero. A continuación, algunos consejos que te
servirán a la hora de administrar tu crédito personal de forma eficiente.
1. Organizar la información
El primer
paso es organizar la información relativa a los créditos. Es muy importante que
tengas presentes todos los créditos que tienes vigentes, incluyendo el tipo de
crédito (tarjeta de crédito, hipotecario, préstamos bancarios, etc.), la tasa
de interés vinculada a cada crédito, y cuál es la cantidad de deuda que posees
para cada uno.
Una vez que
tengas una idea clara de cómo se distribuye tu pasivo, es hora de estudiar la
forma de administrar tu crédito de la forma más eficiente posible, y de forma
de que gastes la menor cantidad de dinero.
2. Acepta la
realidad
La razón
básica detrás de las deudas es que las personas gastan dinero que no tienen y,
a la larga, terminan en una bola de nieve de intereses del que no pueden salir
nunca más. Esta es la gran diferencia con la gente rica. Ellos ahorran dinero
en lugar de gastarlo, y posteriormente invierten ese dinero, creando una bola
de nieve de ingresos en lugar de intereses.
Es hora de
que aceptes cuáles son tus posibilidades, y que gastes de acuerdo a tus
ingresos. También puede que resulte difícil aceptar que te encuentras en una
situación de deudas que se salió de control. Cuanto antes lo aceptes, más
sencillo será salir de ella. No existen soluciones mágicas, y es necesario
recurrir a la austeridad y a realizar esfuerzos extra de trabajo para mejorar
tus flujos de dinero, y así colocarte en una mejor posición para enfrentar tus
créditos.
3. Pagos
Hay una
serie de reglas en cuanto a los pagos que debes hacer por los créditos, y que
debes comenzar a cumplir sin excepción. Debes ponerte como regla el no pagar
por debajo del pago mínimo exigido. Cada vez que lo hagas, por más que sientas
que estás gastando menos dinero, lo único que haces es aumentar tu deuda,
aumentar los intereses, y empeorar tu situación financiera.
Es más, si
quieres salir de una situación de mucha deuda, no alcanza con esto, y tendrás
que pagar por encima del monto mínimo. Lo ideal es siempre pagar el total del
pago correspondiente al mes, o al período de tiempo que sea. Cuando accedes a
un crédito bancario, los bancos pretenden que no pagues el total del pago, de
modo que tengas que abonarles intereses, y así quedarse con más de tu dinero.
Si no tienes
la posibilidad de cubrir todos los pagos correspondientes, comienza por
aquellos que tienen la tasa más alta. Estos son los que más dinero te quitan
día a día. Cuando los tengas controlados, sigue por los que continúan en orden
de mayor a menor tasa.
Debes
comenzar a respetar las fechas de los pagos. Cada atraso, cada pago por fuera
de la fecha, es un aumento extra del interés. Ante una situación de deuda, no
puedes darle ninguna ventaja al banco, por lo que procura siempre pagar en
fecha. Si crees que corres riesgo de olvidarte o de tener pereza el día del pago, pon los pagos
en débito automático, de modo que el dinero se debite de tu cuenta
automáticamente.
4. Nunca
solicite nuevos créditos cuando aun sigue pagando otro.
Nunca acceda
a un nuevo crédito para pagar otro. Es preferible atrasarse en el mismo
crédito, pero no acceder a otro más. Es como comprar una camisa, y pagarle a
alguien dinero para que te dé dinero para costear la camisa. Si usted comprara
la camisa directamente, pagaría $20. Si pide dinero prestado pagará $20 + $4. Y
si pide un crédito para costear el préstamo que pidió inicialmente, pagará $20
+ $4 + $3. Está creando una máquina de gastar dinero.
5. Aprenda
de sus experiencias
Si logra
salir de una situación complicada de endeudamiento, aprenda de su propia
experiencia, y de lo difícil que es lograr salir de esa situación. Ahorre
dinero de forma mensual, por más poco que sea. Establezca una cantidad
determinada que no se tocará a menos que sea para una emergencia. En el futuro,
podrá utilizar ese dinero para costear cosas por las que de lo contrario
tendría que endeudarse.
¡No vea la
deuda como un ingreso adicional! La deuda es 100% gasto. El desafío radica en
no caer en el consumismo extremo, en creer que necesitamos todo de forma
inmediata, y aprender a vivir de acuerdo a lo que nuestros ingresos nos
permiten. Si aprende a ahorrar dinero de forma mensual, a la larga tendrá la
posibilidad de aumentar su calidad de vida.
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